La gimnasia de Lamasería se compone de un antiguo conjunto de ejercicios tibetanos que actúan rejuveneciendo cuerpo, mente y favoreciendo una larga y saludable vida.
Parece ser que su origen es muy antiguo, corresponde a unas prácticas de ejercicios denominados “Phrul ’Khor”, anteriores al yoga tibetano.
En 1939 Peter Kelder publicó un libro llamado The Eye of Revelation gracias a las conversaciones que mantuvo con un coronel retirado del ejército británico. El coronel le contó que durante su estancia en la India, un grupo de lamas que al parecer habían descubierto la "fuente de la juventud ", le hablaron de los viejos que inexplicablemente se volvían sanos, fuertes y llenos de "vigor y virilidad" después de entrar en una determinada lamasería. El coronel Bradford (pseudónimo) llegó a encontrar esa lamasería y vivió con los lamas, donde le enseñaron cinco ejercicios, que llamaron "ritos".
Kelder en su primera publicación explica que los lamas describen siete "vórtices psíquicos" dentro del cuerpo: dos de ellos se encuentran en el cerebro, uno en la base de la garganta, uno en el lado derecho del cuerpo en las proximidades del hígado, uno en la anatomía del aparato reproductor, y uno en cada rodilla. A medida que envejecemos, la velocidad de giro de los "vórtices" disminuye, lo que desemboca en "mala salud". Sin embargo, la velocidad de giro de estos "vórtices" puede ser restaurado mediante la realización de los cinco ritos diariamente.
A mi me llegaron hace años a través de una compañera gnóstica, más adelante me los trajo de su país una amiga cubana y posteriormente los encontré en un viejo folleto de Reiki. Si los recibí por diferentes vías no puedo obviarlos.
Efectuando los ejercicios 10 minutos al día los resultados son visibles desde el principio.
Estos ejercicios se aprenden fácilmente en este taller teórico / práctico
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